La enfermedad de Crohn es una patología crónica para la que no se dispone de un tratamiento curativo en la actualidad. Puede afectar a cualquier parte del tubo digestivo, desde la boca al ano, pudiendo, en ocasiones, causar graves problemas a las personas que la padecen. La cronicidad de la enfermedad, los controles periódicos, un tratamiento farmacológico continuado y la posible necesidad de intervenciones quirúrgicas tienen una gran repercusión en la vida familiar, laboral, social, etc. del paciente y condicionan considerablemente su percepción de salud y su calidad de vida.