“Las personas que presentan déficits cognitivos tras un ACV tienen el triple de riesgo de mortalidad, y son más propensas a ser institucionalizadas”
“Si podemos mejorar la cognición a través del ejercicio, que también tiene muchos beneficios físicos, esto debería convertirse en el estándar de atención de las personas tras el ACV”.
Un estudio revela que el ejercicio mejora los problemas derivados del ictus.
Para comentar debe estar registrado.